jueves, 29 de mayo de 2008

El derecho a parir y no morir

Por Silvina Molina

Las cifras son contundentes. En Argentina la tasa de mortalidad materna es del 4,8 por cada 10.000 niños o niñas nacidos vivos en 2006. La realidad obliga a humanizar los números e invita a reflexionar sobre el camino transitado por las mujeres para ser protagonistas de sus derechos sexuales y reproductivos, y sobre todo, para sostenerlos. En esta entrevista Eleonor Faur, oficial de enlace en Argentina del UNFPA y la médica Mariana Romero, investigadora del CEDES coinciden en destacar los avances en nuestro país para lograr el acceso universal a la salud sexual y reproductiva.


''El importante logro que se produjo en la Argentina con la sanción de la Ley de Salud Sexual y Procreación Responsable, con la creación del programa homólogo y con otra serie de normas que buscan la protección de este derecho es una muestra de los avances que hay para lograr el acceso universal a la salud sexual y reproductiva. El relanzamiento del Programa este mes habla de un compromiso afianzado en este sentido'' dice la socióloga Eleonor Faur, oficial de enlace en Argentina del Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA).

''Hace cinco años no teníamos el Programa, ni el protocolo de atención post aborto, ni el protocolo para atender abortos no punibles'' agrega Mariana Romero, investigadora del Centro de Estudios de Estado y Sociedad (CEDES) y que estará presente hoy en el seminario nacional La reducción de la mortalidad materna: asignatura pendiente en la Argentina, convocado por Católicas por el Derecho a Decidir (CDD) – Córdoba, CEDES (Centro de Estudios de Estado y Sociedad, y Grupo de Justicia y Género del CIEPP (Centro Interdisciplinario para el Estudio de Políticas Públicas).


Todo esto en el haber. ¿Y en el debe? ''Que esos logros se sostengan, que se implementen'', aporta Mariana Romero.

Hay dos hipótesis respecto al incremento de la mortalidad materna. Eleonor Faur explica que la primera se relaciona con una mejor cuantificación de la misma. ''Sin embargo –aclara, estudios realizados por el programa de Becas en Salud, del Ministerio de Salud de la Nación en años anteriores, indican que la medición de estas muertes estaba razonablemente bien realizada''. La segunda hipótesis es que puede haber habido algunos focos en los que determinadas regiones sanitarias tuvieron una suerte de epidemia de muertes maternas. ''Si esto fuera así, sería altamente recomendable adelantar estudios específicos que puedan dar cuenta del modo en que se produjeron estas muertes, con alta participación de los equipos de salud que participaron en las regiones en donde se produjeron, de modo de poder identificar cuáles fueron los problemas específicos que resultaron en la muerte de las mujeres y trabajar sobre éstos para evitarlos en el futuro inmediato''.

En la Argentina desigual, Chaco tiene una tasa de mortalidad materna de 12,8 por mil contra el 1,8 por mil de la Ciudad de Buenos Aires. “La brecha entre algunas provincias creemos que se sostiene, sobre todo en las regiones NEA y NOA donde pensamos que se triplica o cuadriplica, pero la sociedad civil no cuenta con insumos que provengan desde el Estado para realizar un análisis confiable”, apunta Romero.

Argentina, un lugar para las madres

La organización Save the Children dio a conocer la investigación Estado de las madres 2008, donde menciona cuales son los mejores y los peores países en el mundo para ser madre. Para América Latina, el documento trae cuatro destaques positivos: Cuba, Uruguay, Costa Rica y Argentina, que figuran entre los 10 primeros países donde las madres viven mejor.

Para Eleonor Faur ''Argentina tiene una importante proporción de partos institucionalizados y de controles prenatales para buena parte de la población. Eso coloca al país en una buena posición respecto de la atención de la salud. En relación con las muertes maternas, Argentina muestra indicadores un poco más preocupantes, ya que la tasa duplica las de países de similares niveles de desarrollo como Uruguay, Chile o Costa Rica. Por eso insistimos en que el tema es realmente llegar a la universalización de estos beneficios de buena atención para todas las mujeres''.

Y Mariana Romero aclara que, en general, Argentina es un buen lugar para las mujeres que tienen embarazos deseados y buscados, pero ''la realidad es otra para las mujeres que viven otra situación''.

Acciones

La representante de UNFPA rescata que en muchos países se encuentran actualmente desarrollando estudios específicos, como parte de su sistema de vigilancia periódico, que se denominan ''estudios de causa raíz de las muertes maternas''. ''Esta metodología supone la detección detallada no sólo de la causa más evidente de la muerte (como ser hipertensión, complicaciones por aborto, hemorragias, etc.) sino más bien de los procesos que llevan a que dichas complicaciones hayan derivado en muertes, resulta una herramienta muy importante para poder evitar futuras muertes durante el embarazo y el parto''.

Y cree que la constante formación del personal de salud, la consolidación de estrategias que logren garantizar que las maternidades de todo el país sean seguras, y tengan todos los insumos que se pueden requerir en una urgencia durante el parto, resultan otro de los componentes necesarios para la atención de este problema.

La investigadora del CEDES agrega: prevención del embarazo no deseado, atención integral de la salud sexual y reproductiva de la mujer, atención calificada de las visitas prenatales, sensibilización a la comunidad para la detección de los signos de alarma del embarazo, el parto y el puerperio, referencia y traslado oportuno a los centros de salud, capacitación a los equipos de salud para la detección de la emergencia obstétrica, uso de las prácticas basadas en la mejor evidencia científica, por ejemplo, el misoprostol o aspiración manual para los abortos incompletos, sulfato de magnesio para el tratamiento de los desórdenes hipertensivos del embarazo, sulfato de hierro para la prevención de la anemia, manejo activo del alumbramiento para el tratamiento de la hemorragia postparto, seguimiento del posparto con consejería y anticoncepción, consejería y anticoncepción postaborto.

Objetivo 2015

Uno de los objetivos que se fijó Argentina, dentro de los Objetivos del Nuevo Milenio, es llegar al año 2015 con una tasa de mortalidad materna del 1,3 por mil.

Lograr la meta implica para Eleonor Faur un conjunto de acciones, que logren fortalecer tanto los programas de planificación familiar, como también la mejora de la calidad de la oferta del servicio prenatal y obstétrico en todos los centros en los que nacen los niños a lo largo del país. ''También la demanda de atención debería fortalecerse y empoderarse. Además de la ley de Salud Sexual y Reproductiva, el Congreso Nacional sancionó otra extraordinaria Ley sobre el Derecho a un parto humanizado. Llegar a la población más pobre resulta un eje clave para cumplir esta meta''. Artemisa Noticias
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